Programa de adaptación e integración familiar para perros adoptados
Generar relaciones de confianza entre tu familia y tu perro es esencial para consolidar buenos hábitos y comportamientos adaptados.La necesidad de vinculación entre familia-perro se convierte en algo especialmente determinante y también difícil de alcanzar cuando hablamos de perros adoptados con cierta edad. La psicología nos enseña que los antecedentes, la historia autobiográfica, las experiencias previas y el pasado tienen un impacto en el presente, en las decisiones, en los comportamientos actuales y muy especialmente en las emociones y en la capacidad de regulación emocional.
Los perros adoptados en un alto porcentaje han sufrido maltratos, vivido condiciones ambientales difíciles y/o altos niveles de estrés físico y psicológico. Todo ese rango de antecedentes desconocidos y negativos configuran una conducta reactiva de defensa que se manifiesta de muy diversas maneras. Los perros adoptados con cierta edad y con antecedentes desconocidos suelen expresar miedo a los humanos o a otros perros mostrándose nerviosos y/o agresivos, incluso con los miembros de su propia familia. Algunos tienen tantos miedos que resulta complicado incluso sacarlos a pasear y muchos suelen tener importantes dificultades y problemas de ansiedad cuando se quedan solos.
Como entrenador me consta que muchas familias después de un tiempo intentando la integración acaban frustradas con su perro adoptado porque no entienden la reactividad, la inseguridad, ansiedad o impulsividad del perro a pesar de su nuevo entorno positivo y familiar. Las familias llegan a mí cansadas de intentar una vinculación que no acaba de culminar y en ocasiones a punto de rendirse.
Si adoptas un perro debemos evitar llegar a ese punto. Mi programa de integración de perros adoptados anima a las familias que deciden adoptar a trabajar sin esperar a que las dificultades aparezcan y su persistencia les haga caer en frustración y rendición. Generar relaciones de confianza entre tu familia y tu perro es esencial para consolidar buenos hábitos y comportamientos adaptados. Y esta necesidad de vinculación entre familia-perro se convierte en algo especialmente determinante y también difícil de alcanzar cuando hablamos de perros adoptados con cierta edad.
Os animo a que nos adelantemos a las dificultades de nuestro perro adoptado trabajando con herramientas eficaces de interacción con el perro y unas pautas de educación (para el perro y su familia) que garantizan limitar esas reacciones “inexplicables” opuestas a las deseadas conductas positivas y adaptativas. Mi programa ha dado magníficos resultados con perros adoptados (algunos realmente inadaptados) potenciando un equilibrio emocional y una integración familiar que parecía inalcanzable.
Siguiendo los principios de mis adiestramientos en el programa de integración familiar de perros adoptados:
- Ganaremos la confianza de tu perro y le mostraremos con amor y paciencia que su contexto es seguro y que ya no es necesario “defenderse” de un ambiente hostil.
- A la familia os enseño a identificar, entender y a corregir las expresiones inadaptadas porque sin tu comprensión de la funcionalidad de la conducta, esto es, tu comprensión de por qué tu perro hace lo que hace, no es posible iniciar un cambio en tu perro.
- Educaremos juntos a tu perro en conductas alternativas positivas y adaptativas con el objetivo de extinguir pautas conductuales inadaptadas, rompiendo así la antigua funcionalidad de las expresiones comportamentales incorrectas.
- Trabajaremos activamente la reducción de conductas impulsivas y reactivas tan implantadas en los perros adoptados, asi como la ansiedad y el miedo, que limitan la capacidad de aprendizaje.
- Aprenderemos a disfrutar TODOS del paseo diario,
- Con sensibilidad y paciencia iras conduciendo a tu perro que irá ganando equilibrio emocional, lo que va a permitir, finalmente, la expresión de su verdadera personalidad.
Y entonces, es cuando llegamos a ese final tan reforzante donde podemos decir: